Días pasados se llevaron a cabo las VIII Jornadas Internacionales, organizadas por la Dirección General Patrimonio, Museos y Casco Histórico dependiente del Ministerio de Cultura del GCBA.

Estas jornadas son convocadas cada dos años desde el año 2003 y tienen el objetivo no sólo de conocer y valorar a distintos centros históricos del mundo sino también de intercambiar experiencias de gestión y buenas prácticas en el manejo de estos ámbitos patrimoniales.

Los cascos históricos concentran el testimonio de las distintas etapas de evolución de una ciudad. En sus orígenes, es el lugar en el que se desarrolla la mayor parte de las actividades vitales: políticas, administrativas, económicas, sociales, culturales y al mismo tiempo, residenciales.

A medida que la ciudad crece, la expansión urbana se desplaza hacia otros sectores generando nuevas centralidades, provocando en muchos casos que el antiguo casco empiece a perder sus funciones originales y su vitalidad. El resultado es que estas áreas ricas en historia y en valor patrimonial, aún cuando mantengan su ubicación central, atraviesan procesos de transformación con grandes riesgos de pérdida de actividades y de residentes, lo que habitualmente provoca consecuencias de deterioro general.

En las últimas décadas se avanzó en la concientización sobre la importancia de los cascos históricos y en la construcción de su memoria e identidad. Poner en valor estos sectores urbanos deja de ser una problemática sólo de especialistas para pasar a ser una preocupación de diversos sectores de la comunidad.

El IVM fue invitado a participar con el tema » La movilidad, factor de vitalidad y presión sobre el centro histórico» disertación a cargo de Andrés Borthagaray.